Rebelo de Sousa defiende la inclusión de inmigrantes en el reclutamiento de las Fuerzas Armadas portuguesas
"En primer lugar, tenemos que acostumbrarnos a la idea de incluir a los inmigrantes en una fuente de reclutamiento para las Fuerzas Armadas. Ya ocurre de forma excepcional, tiene que convertirse en algo natural", dijo.
El Jefe de Estado intervino en el I Foro de Reclutamiento organizado por el Ejército del Aire, en el Teatro Thalia, en Lisboa, sobre el tema de los retos del reclutamiento militar.
"En segundo lugar, existen desigualdades en la sociedad portuguesa, bolsas de miseria y clivajes sociales y territoriales que condicionan las opciones de reclutamiento de las Fuerzas Armadas. Sólo hay que ver algunos casos concretos de instituciones que tienen una contratación casi local, en contextos en los que es lo más atractivo y fácil para quienes no tienen otras alternativas inmediatas en ese contexto tan específico", añadió.
En una intervención de unos 40 minutos, y con algunos jóvenes entre el público, sobre diversos factores relacionados con el reclutamiento militar, Marcelo Rebelo de Sousa argumentó que "es necesario pensar, en relación con el personal permanente, como en relación con los diversos regímenes contractuales, en ajustar lo que se puede ajustar, no sólo en el reclutamiento sino también en la organización, en la comunicación interna, en la comunicación externa, en el funcionamiento, a lo que es la realidad de las nuevas generaciones pero también a lo que es la realidad de las sociedades".
El Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas consideró que "es evidente que una institución tan prestigiosa, tan fuerte, tan referente como las Fuerzas Armadas, por naturaleza siempre es más lenta para cambiar" pero "ha hecho un enorme esfuerzo para cambiar rápidamente", sin compararse con los militares "de la época colonial" o de la post Revolución de los Claveles de 1974.
"Pero es una tarea dramática la que enfrentan los parlamentos, los gobiernos, las instituciones internacionales que siempre van tras los daños, tras los cambios que se producen. Es un reto difícil sobre todo por esto: porque la sociedad portuguesa está envejeciendo", subrayó.
Según el jefe de Estado, hay una parte de la sociedad portuguesa que "tiene una inercia de ver la institución de una manera que no tiene nada que ver con lo que fue y se presenta hoy aquí como un acercamiento de las nuevas generaciones a la realidad de las Fuerzas Armadas".
"No es sólo un problema de que dentro de las Fuerzas Armadas los menos jóvenes tengan dificultades para cambiar", dijo.
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