Portugal mantiene las restricciones en Lisboa 15 días más al acumular el 83% de los casos

LISBOA.- El Gobierno portugués ha decidido este lunes prolongar durante al menos otros 15 días las restricciones impuestas en la región de Lisboa, que este lunes acumuló el 83% de los nuevos casos de coronavirus en el país.

La ministra de Presidencia, Mariana Vieira da Silva, ha anunciado que a pesar de que se ha registrado una "tendencia decreciente" en la última semana en los cinco municipios más afectados por la pandemia, es necesario "consolidarla", por lo que todavía no van a levantar las restricciones, que estaban vigentes hasta el 14 de julio.

"No estamos en condiciones de quedarnos tranquilos", ha afirmado la ministra, que avanzó que la tasa de incidencia del virus en esos cinco municipios -Lisboa y cuatro de su periferia- bajó de 154 a 121 por cada 100.000 habitantes.

Portugal ha registrado hoy 306 nuevos casos de covid-19, el 83% en la región de Lisboa y Valle del Tajo, lo que aumentó el número total de positivos en el país desde que comenzó la pandemia hasta 46.818.

Además, en las últimas 24 horas hubo dos fallecimientos, por lo que se alcanzaron las 1.662 víctimas mortales.

Con la decisión adoptada hoy por el Ejecutivo, Portugal continuará "a tres velocidades", con diferentes restricciones según la zona.

Un total de 19 parroquias civiles -unidad administrativa un escalón por debajo del Ayuntamiento- de las 118 que integran el área metropolitana de Lisboa, seguirán en situación de calamidad, con un "deber de recogimiento" por el que solo deben salir de casa para actividades esenciales, como trabajar y comprar alimentos.

El resto del área metropolitana de la capital está en estado de contingencia, con restricciones en horario nocturno -la mayoría de los establecimientos comerciales cierra a las 20 horas-, y el resto del país continúa en estado de alerta, con medidas de protección y distanciamiento social que no afectan sustancialmente al día a día.

Las brotes que afectan a la región de Lisboa desde finales de mayo han empañado la imagen de Portugal, que al inicio de la pandemia fue considerado uno de los países que mejor había controlado el virus.

La situación del último mes y medio ha llevado a que el Reino Unido lo dejase fuera de la lista de países exentos de cuarentena y a que Bélgica incluyese la región de Lisboa entre las "zonas rojas" -lo que identifica como alto riesgo de Covid-19- y al Alentejo y el Algarve en las "naranjas" -mayor vigilancia-.

El ministro de Exteriores luso, Augusto Santos Silva, ha exigido hoy que Bélgica retirase estas dos regiones de la zona naranja, una medida que le tomó por "sorpresa", ha asegurado en declaraciones a la prensa lusa en Bruselas donde se reunió con sus homólogos de la UE.

La semana pasada, el primer ministro portugués, António Costa, ya había señalado que "no tiene sentido" que Reino Unido obligase a guardar cuarentena a los viajeros procedentes de Portugal.